viernes, 24 de abril de 2009

Desastre humanitario en Sri Lanka


Las guerras civiles son procesos frecuentes en la historia contemporánea. Producto del colonialismo, numerosos Estados-nación fueron creados bajo la ficción de la división étnica irreconciliable, pero necesaria para la pervivencia del Estado en cuestión. Vaya contradicción! Los casos más dramáticos de este fenómeno los podemos encontrar en el África central, en donde los imperios europeos dividieron a la población de manera indiscriminada, sembrando la semilla de la infausta violencia entre diferentes etnias; Ruanda, Burundi, Uganda y la República Democrática del Congo son los más claros ejemplos del grado de violencia que se puede cometer cuando en aras de conseguir un beneficio político y económico se esgrimen argumentos étnicos por parte de determinada facción. A este proceso de violencia y asesinatos en  masa, lo cual per se conlleva a un desastre humanitario, se le llama genocidio.

En esta ocasión vamos a referir brevemente la dramática situación de Sri Lanka, que actualmente vive un conflicto militar entre las fuerzas leales al gobierno y los Tigres de Liberación del Eelam Tamil. Para comprender grosso modo el conflicto es necesario un contexto histórico.

El imperio más poderoso que ha existido sobre la faz de la tierra, o sea el Imperio Británico, colonizó el sureste asiático en el siglo XIX, de donde extraía materias primas que enriquecían enormemente su tesoro público. Las colonias del sureste asiático fueron importantes para los británicos no sólo por su enorme riqueza natural sino también por su posición estratégica al estar situadas en la costa del Océano Índico oriental. India fue quizá la colonia más importante para el Imperio Británico, pero no la única. Sri Lanka, antiguamente llamada Ceylán también fue parte de este sistema colonial, lo cual, tras su independencia en 1948, le costó sangre, pues la reconstrucción de una nación tras siglos de opresión por parte de un Imperio es de suma complejidad, desorden, anarquía e ingobernabilidad. México en el siglo XIX es claro ejemplo de lo que acabo de exponer.

Sri Lanka, pues, desde su independencia ha venido trabajando enormemente en su afán de construir un Estado que ejerza verdaderamente el poder en toda la isla. Sin embargo, el problema que más ha obstruido la realización de este propósito es la presencia en la parte oriental de la isla del grupo “político”-militar autodenominado Tigres de Liberación del Eelam (LTTE), creado en 1976. Básicamente este grupo, calificado por el Departamento de Estado como organización terrorista en 1997, tiene como consigna la creación de un Estado Tamil independiente de Sri Lanka. A pesar de que, como mostró el censo de 2001, los singaleses constituyen el 82% de la población, mientras los tamiles sólo el 9.4%. (Véase Jayshree Bajoria, “The Sri Lankan Conflict”; Council on Foreign Affairs, 10.2.09).

 Entonces, el problema radica en que los Tigres Tamiles, nombre comúnmente usado para referirse a los integrantes de esta agrupación, quieren la independencia de la zona donde su etnia es mayoritaria. Llevan a cabo acciones violentas y terroristas, amedrentan a la población y con base a estas acciones tratan de negociar para obtener respuesta a sus demandas. Así, tratando de obtener el poder de la región y en última instancia crear un Estado Tamil, el LTTE se ha enfrascado en una constante lucha con el ejército gubernamental de Sri Lanka, en la que desgraciadamente la principal perjudicada ha sido la población en general.

Como hemos dicho este conflicto no es nuevo, sin embargo, en estos últimos días el ejército singalés (gentilicio de Sri Lanka) está llevando a cabo una campaña de represión contra los integrantes del LTTE. En este conflicto buena parte de la población tamil está atrapada, pues ésta se ubica en la parte oriental de la isla anteriormente llamada Ceylán, por lo que la salida al mar es su única opción. Según Naciones Unidas aproximadamente 50,000 tamiles están atrapados en el desarrollo de los enfrentamientos militares, lo cual está causando un desastre humanitario en aquella región del planeta, porque la infraestructura y los servicios médicos son prácticamente nulos; la población está desprotegida. Aunado a los 50,000 atrapados en la zona de guerra, 95,000 más han abandonado la región y se han marchado a campos de refugiados en donde las condiciones humanitarias son realmente precarias. (Al Jazeera, 24.4.09).

Ahora bien, la prensa mundial no se encarga demasiado en el trato de estos asuntos, prefiere darle seguimiento a las acciones de las principales corporaciones banqueras y a la resolución de la crisis financiera del insolvente modelo neoliberal del capitalismo. De lo que se trata es de que el público en general se entere de las acciones sin sentido humanitario que no sólo gobiernos de Estados poderosos, como EU, llevan a cabo, sino que también pequeñas organizaciones como el LTTE,  el cual enarbola la independencia de una reducida región para realizar actos terroristas y obtener financiamiento mediante secuestro y extorsión a la población tamil que vive afuera de Sri Lanka.  

Con lo anterior no quiero decir que las cosas se deben de quedar así, por supuesto que no, las negociaciones deben de estar en primer plano antes que el conflicto militar, porque por encima de todo debe de cuidarse la integridad de los miles de desplazados por los constantes conflictos. Tampoco exento de responsabilidad al gobierno de Sri Lanka, que actualmente no busca una solución pacífica al conflicto, pues éste debería de proponer mesas de negociación en donde no se descartara la posibilidad de crear una república autónoma tamil dentro del propio Estado de Sri Lanka.  Soluciones pacíficas las hay, sólo que se necesita voluntad política. Pero ante todo son reprobables las acciones terroristas tanto del ejército singalés como las de los Tigres de liberación. Ambos ejércitos utilizan tácticas inhumanas y violan frecuentemente los derechos humanos: utilizan niños soldados, realizan actos suicidas, y se sirven de la población como escudos humanos.

Desde mi perspectiva, la más inmediata solución al problema humanitario es, sin lugar a dudas, el envío de una misión de paz de Naciones Unidas a la región, la cual debe de estar acompañada de una misión humanitaria cargada con toneladas de víveres, medicamentos y material de construcción para nuevas viviendas que son menester para la población desplazada, que lo ha perdido todo  merced a los combates.  La pregunta sería, ¿les interesará resolver este problema a las grandes potencias? Lamentablemente la respuesta es negativa. No hay interés.

1 comentario:

Consalvo Ferrante dijo...

El conflicto en Sri Lanka debe ser visto desde una perspectiva política, étnica y religiosa.
Es menester tener en cuenta que Sri Lanka fue importante en los primeros años del budismo, pues durante la dinastía mauria gupta en la India el rey Ashoka (quien llevó al budismo hinayana a su máxima expresión en la india) viajó personalmente a Sri Lanka a entablar negociaciones diplomáticas, trayendo consigo el budismo en la isla. Su éxito radica en que el budismo cubrió muy bien las necesidades metafísicas de los habitantes, además Ashoka les dio de regalo a los isleños una reliquia sagrada del Gautama histórico, misma que aun se conserva en una estupa. Por ello para los de Sri Lanka el budismo es un gran orgullo nacional, pues el budismo que ellos profesan se perdió en la India durante los siglos VII a IX debido a la reexpansión del induismo y la entrada temprana del islam.
Por su parte, los támiles componen la segunda etnia más importante en la India, además de ser la más antigua en cuanto a vestigios arqueológicos. Este pueblo no-indoeuropeo (drávida de hecho) se vio en problemas cuando su tradicional zona del sur de la india se vio amenazada por la expanción de algunos rajatos del norte indoeuropeo 8de tradición sánscrita), por lo que algunos támiles viajaron a Sri Lanka en busca de refugio, riquesas, etc... Estos támiles se establecieron en la isla y pudieron prosperar algo, aunque perdieron contacto con los támiles que aun hay en la India.
Cabe aclarar que en su gran mayoría los támiles son hinduistas, y para ellos la isla de Sri Lanka tiene un papel sagrado puesto que que en el Ramayana el dios Rama crusó a la isla a derrotar a Asura y salvar a su novia, lo que le da un caracter mitológico a dicha isla.
Ahora bien, a los habitantes originarios de Sri Lanka nunca les agradaron los támiles por no ser budistas, de otra etnia, costumbres y haber llegado como invasores. Aun así los támiles se adaptaron y sobrevivieron en la isla hasta la llegada de los ingleses.
Ya en la época colonial (al igual que en la India)los ingleses se ganaron el apoyo de los támiles para gobernar, esto debido a que los ingleses les dieron privilegios a los támiles y se prohibió la histórica discriminación hacia los támiles.
Ya con la independencia de la India, Pakistan, Bangladesh y Sri Lanka el gobierno de la isla quedó constituido con un parlamento. El gran problema vino con que los ingleses al irse dejaron a los támiles a la cabeza del parlamento, lo cual los támiles aprobecharon para igualar legalmente a los budistas nativos y a los támiles, pero a los nativos que jamás les agadaron los támiles no les gustó la idea y desidieron que los tamiles debían "regresar a la India", aunque los támiles de hoy no hallan nacido ahí.
A los pocos añs de la independencia los budistas dan un golpe de estado y el nuevo parlamento queda constituido con putros budistas, lo que hace que muchos támiles migren a la india, pero muchos otros se quedan a sufrir las políticas discriminatorias.
Es con ello que surgen los Tigres de Ceilan (Ceilan es el nombre que tubo la isla durante el mandato británico, y los támiles se reconosen más como ceilaneses que como srilankeses).
A pesar de sus buenas intenciones, los tigres han sido muy brutales con los támiles qu tienen a la mano, al igual que el gobierno de sri lanka y sus represalias.
Con todo ello se antoja my dificil la paz, la cual los budistas proponen aun hoy en dia con la expulsion de los támiles. Por su parte, la India ya intervenido militarmente en algunas ocaciones en apoyo a los támiles y por ello las relaciones diplomáticas con Sri Lanka son nulas. Tambien por el apoyo de armas y dinero los tigres han sovrevivido hasta ahora, y el hecho de que no fueran aplastados rapido tambien tiene que ver con las amenazas de la india de invadir la isla si se aplastaba a los tamils (algo interesante s consideramos que la india representa la 5ta potencia militar en el mundo).
Bueno, lo único que se me ocurre es que la India ya invada Sri Lanka y ponga en su lugar a ambos bandos, que de mano de ellos no llegarán nunca a la paz.