miércoles, 29 de abril de 2009

Los primeros 100 días de Barack Obama en la presidencia de Estados Unidos











El pasado lunes 27 de abril se cumplieron 100 días desde que asumió la presidencia de Estados Unidos Barack Hussein Obama. A continuación haremos un análisis sucinto de sus principales acciones en materia de política exterior, que es lo que nos interesa en este blog.

Desde mi punto de vista 4 son los aspectos más importantes en la conducción de la política exterior de Obama. Al menos así lo han mostrado sus primeras acciones. 1) El más importante de todos: Afganistán y Pakistán. 2) El establecimiento de una relación de mutuo respeto e interés con Rusia. 3) El fortalecimiento del vínculo estadounidense con Turquía. 4) La reconfiguración de las relaciones con Latinoamérica, especialmente el caso de Cuba. Desglosemos, pues, cada uno.

1) Afganistán y Pakistán. Como bien señaló durante su campaña presidencial, Obama está centrando sus esfuerzos en eliminar la resistencia talibán y de Al-Qaeda en los diversos frentes en la convulsa frontera de ambos países. Su estrategia, denominada en los círculos académicos estadounidenses como el combo AfPak, está centrada básicamente en emprender una ofensiva militar de largo alcance (por eso fue a pedir tropas a Europa en la pasada cumbre de la OTAN en Estrasburgo). Sin embargo, en mi opinión, esta ofensiva está destinada a fracasar si no se fortalecen las instituciones políticas tanto en Pakistán como en Afganistán, principalmente en el primero.

Así, Pakistán debe ser el principal objetivo de Estados Unidos. Sin cambios significativos en Pakistán, no puede haber ningún éxito en Afganistán. Por lo tanto, ambos países forman una relación dialéctica en términos de estrategias; sin el éxito en alguno de ellos no puede haber éxito para el otro.  Algunas de las estrategias que pueden funcionar son las siguientes:

a) Intensa labor diplomática. Ésta está a cargo del flamante diplomático Richard Hoolbroke, quien dicho sea de paso tiene en su currículum el haber obtenido el pacto que finalizó la cruenta guerra de Bosnia en 1995. En una entrevista en CNN hace algunas semanas el diplomático mencionó que ésta es la tarea más ardua que jamás haya tenido en términos de negociación política, lo cual significa que la situación en Pakistán no es nada alentadora. Así, el trabajo de Hoolbroke debe radicar en conciliar las partes políticas, demasiado divergentes en aquel país, asimismo, en cooptar elementos del Talibán moderados, pues muchos de ellos actúan bajo amenazas de grupos más radicales, como Al-Qaeda.

b) Desarrollo económico. En este apartado se incluyen las medidas que EU debe de tomar con tal de estimular la economía pakistaní, para que ésta se avoque a realizar fuertes gastos en materia educativa, infraestructura, fomento agrícola y reconstrucción de viviendas, así como una gran inversión a las policías locales en las áreas fronterizas con Afganistán.

c) Ataques militares bien definidos. Se ha venido haciendo, incluso desde la presidencia de George W. Bush, el bombardeo de objetivos en territorio Pakistaní mediante aviones de alta tecnología no tripulados. Sin embargo, esos objetivos rara vez fueron alcanzados, generalmente dañando a la población civil.  Una nueva estratagema militar, de objetivos bien definidos, en donde los talibanes tengan sus safe heavens, puede servir para eliminar cabecillas importantes de los movimientos insurgentes, principalmente en el valle del Swat y en las Áreas Tribales Federalmente Administradas.  

Para una revisión más pormenorizada de las estrategias necesarias para pacificar, estabilizar, fortalecer tanto Afganistán como Pakistán véase el informe del Council on Foreign Affairs titulado, “From AfPak to PakAf. A Response to the New U.S. Strategy for South Asia”. (CFR, abril 2009).

 

2) Rusia. Como bien sabemos, las relaciones entre la Federación de Rusia y Estados Unidos, durante la presidencia de Putin y Bush respectivamente, llegaron a su nivel más bajo desde la Guerra Fría. Ahora, Obama, junto con un presidente ruso más abierto al diálogo, aunque realmente sea Putin quien tenga el poder, intenta buscar la cooperación del país más extenso del mundo en temas en los que esté directamente inmiscuido tales como Afganistán, Corea del Norte y principalmente Irán.  

 

No obstante, el gran hito durante estos primeros 100 días fue la disposición de reducir a niveles históricos el número de cabezas nucleares de ambos países. Es necesario remplazar el casi caduco START (Strategic Arms Reduction Treaty), por un tratado que, a partir de la expiración de este último en diciembre del presente año, reduzca al máximo la amenaza nuclear. Obama está sentando las bases para un tratado con Rusia que si no radical, sí significativamente reducirá las armas de las dos potencias nucleares más importantes.

 

3) Turquía. Salvo el tropiezo que Obama cometió, referido en mi post anterior, la política de acercamiento hacia este país musulmán secular está funcionando; pues este país es de suma importancia en materia geopolítica y geoestratégica no sólo para Estados Unidos sino también para Occidente. ¿Por qué es tan importante Turquía para la política exterior estadounidense? Simple y sencillamente porque de ella depende en buena medida para que se concrete uno de los proyectos energéticos más ambiciosos de Occidente: el oleoducto Nabucco, o BTC, el cual correría de Bakú, Azerbaiyán, a Tbilisi, Georgia, y de ahí a Ceyhan, Turquía. Con la concreción de este ambicioso proyecto, (extraer petróleo de las repúblicas de Asia Central ribereñas del Caspio y transportarlo a Europa vía Turquía), Estados Unidos asestaría un severo a golpe a Rusia en su política energética, pues cabe recordar que ésta es la principal proveedora, y en algunos países a niveles impresionantes, de energéticos a Europa. Nabucco reduciría enormemente la dependencia europea de Rusia.  (Véase el artículo del diplomático indio M K Bhadrakumar, “US promotes Iran in energy market”; Asia Times Online, 28.4.09).

 

4) Latinoamérica. Aunque a muchos no les pareció la resolución final de la pasada Cumbre de las Américas en Trinidad y Tobago, es claro que el tono en las relaciones entre Estados Unidos y América Latina ha cambiado. Los países de Latinoamérica, principalmente gobernados por la izquierda, han delineado una política hacia EU de autonomía política e independencia económica. Desde hace muchos años EU no es más la mano que mese la cuna en las políticas internas de muchos de los países latinos. Bush nunca lo entendió, Obama sí. Esta es la gran diferencia.

 

Cuba en particular es el asunto más delicado para EU. Las primeras medidas que adoptó Obama (viajes ilimitados para la comunidad cubano-estadounidense, envío de dinero, siempre y cuando no vaya a parar a las arcas de los Castro, entre otras) son clara señal de su disposición a restablecer las relaciones con la isla. Relaciones que dependen de un hecho en particular: el bloqueo. La pregunta obligada es: ¿debió decretar la finalización del bloqueo Obama? No. En política exterior las medidas radicales son contraproducentes. Paso a paso Obama está construyendo puentes de comprensión entre la comunidad cubana radicada en EU y los demás grupos políticos, para que en algunos años el bloqueo finalice. No me queda duda, y me arriesgo a decir que a mediados de su segundo periodo presidencial, porque estoy seguro que será reelecto a menos que algo catastrófico suceda, terminará el bloqueo hacia Cuba. Para ese entonces la pregunta será ¿cómo va a reaccionar Cuba ante tal suceso? Ya sin Fidel las cosas serán muy diferentes a como se pueden plantear ahora.

 

En suma, Barack Obama demostró en estos primeros 100 días que entendió muy bien que las relaciones internacionales hoy en día se rigen bajo el paradigma de la multipolaridad, esto es, la participación activa de una gran cantidad de países que reclaman su presencia en la arena internacional.

 

Podemos afirmar que ha terminado la era unipolar en la que Estados Unidos se asumía como la única y gran potencia rectora del destino de la mayoría de los países del orbe. Bush se encargó de propagar esta idea, ocasionando únicamente la decadencia en picada de su país.

 

Además, Obama ha optado por un camino mucho más respetuoso y efectivo en la búsqueda de consensos y puentes de mutua comprensión entre los diversos Estados: la diplomacia. Sin embargo, no seamos ingenuos y pensemos que Estados Unidos va a querer dejar de ser el imperio que siempre ha sido. Eso nunca.  Dicho país, (así como Rusia, Francia, Inglaterra y los grandes imperios que han existido en la historia de la humanidad), tiene inextricablemente unido el afán imperial en su código genético cultural. La gran diferencia es que Obama se dio cuenta de que su imperio puede convivir con las demás naciones y actúa bajo su premisa que reza de la siguiente manera: “mutuo respeto y mutuos intereses”. Esperemos que al menos en los próximos 1000 días el histórico presidente siga cumpliéndola. 

2 comentarios:

T0W3RS 01R0S dijo...

http://news.bbc.co.uk/2/hi/south_asia/8035204.stm
... tan bueno ha sido el gobierno de Obama??

Consalvo Ferrante dijo...

Bonita apología de Obama, ahora vallamos a la realidad:
1.- En el caso de Afganistán y pakistan, Obama debe entenderlo: Occidente jamás podrá domar en lo más mínimo esa región. Durante siglos las potencias occidentales solo han fracasado en dominar el corazón de asia central, y dudo que hoy lo logren solo por que un mulato diriga las operaciones militares. Por más que se compre a los gobernantes locales, las tribus jamás se bajarán de su plan belicoso antioccidental que las ha caacterizado en sus anteriores contactos con occidente. Y la insurgencia islámica solo llegará a su fin l dia que los occidentales salgan completamente de la región. Con esa condición se podría dialogar razonablemente COMO IGUALES, no a la usansa occidental donde los blancos le imponen sus cndiciones a los nativos.Además meterse con Pakistán enemista más a gringoland con la India (recordad que la India y Pakistan se traen de la greña desde su independencia).
2.- Obama podrá haber suavizado las cosas con la ruskaya fioderasiya, pero hasta que no desista de interferir en el tradicional terriotrio de influencia del kremlin no podrá er verdadera paz. Ahora, considerando que los eslavos están llenando el hueco que Bush dej´en sudamérica (y que obama piensa recuperar) no me sorprendería de ver altas griciones entre putin y el primo de memín pinguín dentro de poco.
3.- Turkia puede ser un buen experimento para Obama, si sabe manejarlo podría ser un verdadero logro histórico para la región. El detall es que actualmente Turquía no tiene ningún pleito grave con los occidentales, así que en este caso es muy viable el hacer tratos entre gringos y turcos, lo que puede beneficiar a ambos... siempre y cuando obama y las élites turcas entiendadn que TURQUÍA JAMÁS SERÁ OCCDENTAL. Si comprenden aquello y dejan de ostigar a la poblaión turca con más reformas prooccidentales se pueden obtener buenas cosas. Y es que algo curioso de la política que han tenido los occidentales es que si un pais no se occidentaliza se le ve como host´l y primitivo. Obama debería entender que si quiere lograr grandes cosas en este mundo debe respetar la integridad cultural de los paises con los que trata, o sea dejar de joder con occidentalizarlos ala fuerza. Mejor que los deje como están y comercie con ellos, así se evitan muchas fricciones y todos salen ganando.
4.- ¿En verdad nos conviene seguir siendo los perros de los gringos?. Los hispanoamericanos debríamos tratar de tomar más las riendas en nuestras cuestiones y apartar más a los anglosajones, a fin de cuentas el mundo es grande y l que nos falte de los anglosajones que nos lo pongan los chinos y rusos. Debemos fomentar más la ruptura ente los anglosajones y los hispanamericanos y dejar que los rusos y chinos se entetengan (hostilmente) con los gringos en nuestro lugar.
Por último, por más carismático que sea Obama pareciese que solo ha maquillado las cosas, espero que si llegue a un segundo mandato sea por que haya grandes cambios en su gestión y no solo maquille las cosas.